Hay muchas personas que asocian los entrenamientos de sueño con dejar a sus bebés llorando toda la noche y por lo tanto lo asocian con algo negativo. Recientemente hablé de los métodos de entrenamiento de sueño que existen y entre esos hay uno que no vale la pena ni nombrar en donde es verdad que se sugiere meter a tu bebé en su habitación y dejarlo llorar hasta el día siguiente. Digo que no vale la pena ni decir el nombre porque no es un método que en Dulces Noches usemos ya que al contrario, lo que nosotros buscamos es ayudar a las familias a descansar y formar más lazos juntos.
Algo que debo decirte es que incluso con los métodos graduales o con acompañamiento que usamos en Dulces noches intentamos siempre contener el llanto pero no voy a mentirte, puede pasar que tu bebé llore y esto es porque para los bebés esta es su forma de comunicación primaria. Y contrario a lo que alguien mal informado pueda pensar, hacer un entrenamiento de sueño requiere de mucho compromiso y acompañamiento de los padres por lo que nosotros lo vemos como un acto de amor en el que te preocupas por el descanso de tu bebé.
A lo largo de los años se ha buscado estudiar sobre el entrenamiento de sueño pero aún no hay información que demuestre que es contraproducente. Los estudios que señalan que el llanto causa estrés crónico y tóxico que puede afectar los circuitos cerebrales son aquellos relacionados con niños que han llorado por problemas como falta de cuidado, maltratos o abusos y en esos casos la historia es completamente diferente.
Sin embargo, se ha demostrado lo contrario. El informe Behavioral Interventions for Infant Sleep Problems: A Randomized Controlled Trial publicado en el Diario Oficial de la Academia Americana de Pediatría señala que hay factores desencadenantes que causan una respuesta positiva al estrés en los niños como el lidiar con la frustración, el estrés que sienten cuando les ponen una vacuna o la ansiedad que sienten el primer día de escuela o guardería. Cuando este tipo de estrés se amortigua con un entorno de lazos afectivos, relaciones estables y de apoyo, las respuestas positivas al estrés promueven el crecimiento y favorecen que nuestros bebés observen, aprendan, respondan y se adapten de mejor forma a las experiencias adversas.
Después de este contexto, me atrevería a decir que las familias que deciden hacer un entrenamiento de sueño lo hacen con amor y buscando mejorar la vida de su familia y sus bebés. El hacer un entrenamiento de sueño con acompañamiento como lo hacemos las sleepbudies con las familias que trabajan en Dulces Noches no se puede comparar con el estrés que sufre un niño abandonado o maltratado, hay casos donde podria decir que es más fácil compararlo con la ansiedad del primer día de escuela o guardería que como ya mencioné no causa impacto negativo en los niños y también hay muchos casos donde los bebés responden sorpresivamente y no lloran más que la primera noche pequeños lapsos y siempre están los papás acompañando al bebé de acuerdo al método que estemos empleando.
Sin duda, todas las mamás y familias del mundo quisiéramos que nuestros hijos durmieran más de 10 horas siempre pero no todas tenemos la fortuna y no podemos impedir que nuestros hijos se enfrenten a cambios y cosas nuevas por descubrir. De hecho cada día en la vida de un niño es algo nuevo por descubrir que al inicio puede causar llanto o miedo pero buscamos siempre que sean experiencias que les sirvan para la vida y les permita tener una vida más feliz porque eso es todo lo que las mamás y los padres en general buscamos para nuestros hijos.
Dulces Noches.